Sistemas de conservación de alimentos.(Antigua Roma.)
En
la actualidad, la congelación, el enlatado y diversas técnicas de conservación
de alimentos hacen posible que la comida pueda ser preservada durante mucho más
tiempo y transportada mucho más lejos que en la antigüedad.
Hoy
en día estamos muy acostumbrados a la
conservación de los alimentos y hay diferentes métodos y técnicas para hacerlo, pero ¿Cómo lo hacían en la antigüedad? ¿Qué métodos utilizaban?
La civilización romana, sin contar con los
avances tecnológicos de hoy en día, crearon métodos de conservación que les
permitiera prolongar la duración de los alimentos.
En la obra de Apicio, se comentan cuáles
eran las técnicas de conservación utilizadas por los antiguos romanos.
SISTEMAS DE CONSERVACIÓN:
Salar, era la técnica más utilizada por los
antiguos. La sal era un producto a su alcance y muy rentable en lo referente a la conservación. La sal dificulta el
crecimiento de las bacterias. Antes de consumirlo, el pescado debe ser
desalado, por lo que lo dejaban en remojo.
Se
utilizaba con las carnes y pescados, principalmente.
Vinagre, conservar en este ácido, creado por
la fermentación del vino, fue otro de los métodos más frecuente en la
antigüedad junto a salar por evitar el crecimiento bacteriano. Se podía
utilizar solo o acompañado de mostaza, sal y miel, salsa con la que se cubrían
los alimentos escogidos para conservar, ya carnes o pescados, ya legumbres.
Estos alimentos podían ser frescos o estar cocidos o fritos.
Ahumar, al poner un alimento en contacto con
el humo, se adquiría un sabor peculiar. Para ello se utilizaban ahumaderos
especiales. Empleado para carnes y pescados.
Salmuera, esta técnica de sumergir un producto
en agua con sal y otros condimentos se empleaban para las carnes, pescados,
legumbres y aceitunas.
Conservar en aceite de
oliva, las legumbres,
el queso y, acompañados con vinagre, los pescados.
Conservar por
fermentación, alcohólica:
el vino y la cerveza; láctea: el yogur y los quesos.
En miel, se cubría el alimento con miel y se
dejaba secar. Este proceso se realizaba, principalmente, en invierno (por la
temperatura ambiental) y para las carnes (frescas o cocidas), frutas (siempre
con el pedúnculo para que no se deshidratara) y legumbres (estas, además de la
miel, podían llevar defritum, vino hervido). Era importante que las piezas
conservadas en miel no se rozaran entre ellas.
Secado al aire, esta técnica permitía eliminar el
agua del producto, conservarlo a temperatura ambiente y utilizarlo con
facilidad. Se empleaba para las frutas, principalmente.
Sumergir en agua
hirviendo (si podía
ser de lluvia, mejor) durante unos minutos y colgar, sobre todo, para frutas y
legumbres (para que se conserven mejor las frutas siempre con pedúnculo). Las
frutas y legumbres se colocaban en un recipiente que se sellaba, tapándolo con
pez y colgándolo al aire en lugar fresco.
Cocer en vino, técnica empleada para conservar las
frutas.
Tras la matanza, se
realizaban los embutidos,
las salchichas y morcillas, para conservar la carne durante más tiempo.
Envasar en un recipiente
perfectamente cerrado,
que contenía el alimento a conservar. Su tapadera se enyesaba o se cubría con
pez negra. Además, se colgaba para que quedara a la exposición del aire. Tenemos
noticias de otro medio de envasar, principalmente las trufas, introduciéndolas
crudas en un recipiente, separadas por capas de serrín, preservándolas de la
humedad. A continuación se sellaba y colocaba en lugar fresco.
Foto Pablo Font. |
Fuentes:
Apicio.
La cocina en la antigua Roma. Madrid. Ed. Generales. Anaya. 1985
Revel,J.F.
Un festín en palabras. Barna. Ed. Tusquets, 1980
Bàguena,N. De l´antiga Roma a la teva cuina. Tarragona. Ed. El Mèdol. 1997
Fotos:
wikipedia
pinteres
Pablo font.
.
Muy buen resumen. Gracias por publicarlo!
ResponderEliminarGracias
ResponderEliminarMuchísimas gracias me ayuda mucho
ResponderEliminarQue buena informacion
ResponderEliminarInteresante. Gracias
ResponderEliminar